MEDITACIÓN
CRISTIANA PARA CADA DÍA DEL AÑO
28 de noviembre
La libertad de la Palabra
"Acuérdate de Jesucristo, del linaje de David,
resucitado de los muertos conforme a mi evangelio, en el cual sufro
penalidades, hasta prisiones a modo de malhechor; mas la palabra de Dios no
está presa. Por tanto, todo lo soporto por amor a los escogidos, para que ellos
también obtengan la salvación que es en Cristo Jesús con gloria eterna"
(2ª Tim.2:8-10).
---Pablo
está en la cárcel; el ocaso de su vida ha llegado. Los sufrimientos son el
corolario de ella. Entonces escribe una de sus últimas cartas. El destinatario
es su querido colaborador Timoteo.
---Una
cosa le consuela en medio de ese aparentemente desolador panorama: la palabra
de Dios no está presa. Pablo está preso, pero no está presa la palabra de Dios.
Y ella está llegando debidamente a los escogidos.
---Hemos
de notar que a esta altura, su preocupación y a la vez consuelo son los
escogidos. A diferencia de la 1ª Epístola, en que tiene en mente la salvación
de todos los hombres (2:4), aquí la atención de Pablo está más focalizada. Los
tiempos son muy malos, él lo ha llenado todo del evangelio, pero muchos se
oponen a
---Tal
vez usted sea un ministro de la Palabra, o alguien que ama al Señor y su obra.
Pero ha perdido su libertad; está en prisiones muy fuertes; los grillos le atan
las manos y los pies. Se siente limitado, confinado, a veces desesperado. Sin
embargo, tenga usted en esto también su consuelo. La palabra de Dios no está
así. Lo que otrora habló, todavía se expande como las olas de un lago agitado.
---No
importa que usted esté hoy imposibilitado de hablar. Es el tiempo de la cárcel,
del sufrimiento. Pero sepa que en la vida de Pablo, la "cárcel" es
sinónimo de madurez, revelación y fructificación.
---El
corazón de Pablo, y su visión espiritual, fueron verdaderamente ensanchados
cuando estuvo en
---Este
es el día del invierno, pero no es el fin de todo. Después del invierno viene
---La
palabra no está presa – ese era el consuelo de Pablo. Vea usted cómo la
palabra vuela, aquello que Dios le dio a usted en otro tiempo, ha roto sus
cadenas; para ella las prisiones no existen, ni las estrecheces del corazón
mezquino. Sea que corra a través de algún medio físico, sea a través de
personas que han sido transformadas por ella. La palabra corre y es glorificada.
---Su
boca está cerrada, y al parecer su corazón está seco. Hasta es posible que sea
usted considerado un "malhechor". Pero vea por el espíritu lo que
Dios está haciendo. Él nunca está encarcelado, y su obra está en constante
avance y crecimiento. La palabra de Dios no está presa. Esa era el consuelo de
Pablo, y ha de ser también el suyo.