MEDITACIÓN
CRISTIANA PARA CADA DÍA DEL AÑO
10 de noviembre
El altar del incienso
---En
el capítulo 30 de Éxodo se describe el altar del incienso. Este altar es
distinto del altar de bronce, que estaba ubicado en el atrio. Éste es de oro, y
más pequeño, y está ubicado en el Lugar Santo.
---Su
ubicación en el Lugar Santo no es casual –como nada lo es en el tabernáculo–. Para acceder a él es preciso haber
pasado primero por el altar de bronce, es decir, por la cruz de Cristo para el
perdón de los pecados. El altar del incienso representa el ministerio intercesor
de Cristo, y, por extensión, de todo sacerdote.
---El
altar de bronce es para expiación; el de oro es para intercesión. Estos son dos
de los oficios del Señor Jesucristo, primero como Cordero y luego como Abogado
a la diestra de Dios.
---El
altar del incienso es el altar de
---Todos
los creyentes están permanente asociados con estos dos altares. Con el de
bronce, pues deben acudir a la sangre de la cruz por el perdón de sus pecados;
y al de oro para desarrollar su ministerio intercesor a favor de los hombres y
la adoración. (Estos son los dos altares de que habla el salmista en Salmos
84:3). Ahora bien, los oficios realizados en este segundo altar se basan en lo
ocurrido en el primero. Sin sangre no podemos estar delante de Dios para
ejercer nuestro sacerdocio. Ninguna oración intercesora sería escuchada; no es
por nuestra justicia, sino por la justicia de Cristo.
---Las
medidas del este altar, como otras del tabernáculo, corresponde a medios
números; lo cual significa que Dios espera al hombre para que colabore con él.
Dios y el hombre hacen la medida completa.
---En
Éxodo se dice que el altar estaba ubicado en el Lugar Santo; pero en Hebreos
9:4 se dice que estaba ubicado en el Lugar Santísimo. ¿Qué significa esto?
Simplemente, que el altar del incienso era introducido del Lugar Santo al Lugar
Santísimo. Así también la oración, comienza en el alma y pasa al espíritu.
---Este
altar tenía también anillos y varas para transportarlo, lo cual nos indica la
progresión de nuestro servicio espiritual. Hemos de avanzar siempre un poco
más, en la dirección del Señor.
---Cada
día debía ofrecerse incienso, a la par del servicio de las lámparas. Pero antes
de describirse la composición del incienso, se describe el aceite de